La semana que viene se acaban las clases en el instituto Santa Cruz de Villabáñez. El miércoles es el último día con los alumnos, luego llegan las reuniones de evaluación, la entrega de notas, la elaboración de actas... hasta el claustro final del viernes 28 de junio... y aún nos queda julio para cualquier otra cuestión... pero se huele el verano. Sí, hoy llueve, pero ayer hubo sol y CALOR, creo que por fin pasamos de los 20 grados. Hoy no, claro.
Total que me toca otra vez despedirme de gente encantadora (porque para mí la otra gente no existe.) De mis compañeras de fatigas, María Dolores, Belén, Elena, Ester... pero sobre todo de mis alumnos y alumnas, mis chicos, mis chicas... esos proyectos de personas de 13, 14 y 15 añitos. Los echaré de menos, cada uno, un mundo... con sus dificultades, con sus sueños, con sus limitaciones, con sus capacidades.... siempre me enseñan tanto. No sé si es legal poner nombres... supongo que sin apellidos no pase nada: Isaac, David, Andrea, Diego, Saul, Marisa, Lucia (sin tilde)... que me recuerdan lo duro que es crecer, ser adolescentes, dejar atrás la seguridad de que te manden y sentir el peso de tener que elegir... porque elegir una ficha significa renunciar a docenas y siempre nos podemos equivocar, y no hay a quién echar las culpas, más que a sí mismo... It´s life!
Pero yo no me equivoqué de profesión, en otras cosas tal vez sí, pero de profesión no. Lo bien que lo paso, cada día, eso es impagable (es una expresión, no tomar de forma literal.) Estuve a punto de ser una trabajadora de repsol, porque pasé todas las pruebas de admisión y me enviaron una carta para que me incorporara el próximo 1 de septiembre a su sede de Tarragona. A mi padre casi le da un patatús cuando dije que no iría "pero si es como sacar una oposición." Lo medité durante los meses de verano y en París (en un viaje inesperado con Carlitos) lo decidí, me iba a Salamanca a seguir estudiando.
¿Qué hubiera sido de mí en una plataforma petrolífera? o a saber dónde... Mi padre, que se cree que soy la leche, dice que ahora sería una jefaza... y yo le contestó "o me había partido la crisma de un resbalón".. ¿una jefaza? y ¿quién quiere ser una jefaza? lo que me hubiera faltado para ser insoportable...
Ahh, y mañana se termina también la Selectividad... parecía infinito este curso y se acaba... Aunque aún faltan las notas y que los chicos elijan la carrera. Otra vez hay que elegir ... y por ende, renunciar...Uff ¡qué presión!
Total que me toca otra vez despedirme de gente encantadora (porque para mí la otra gente no existe.) De mis compañeras de fatigas, María Dolores, Belén, Elena, Ester... pero sobre todo de mis alumnos y alumnas, mis chicos, mis chicas... esos proyectos de personas de 13, 14 y 15 añitos. Los echaré de menos, cada uno, un mundo... con sus dificultades, con sus sueños, con sus limitaciones, con sus capacidades.... siempre me enseñan tanto. No sé si es legal poner nombres... supongo que sin apellidos no pase nada: Isaac, David, Andrea, Diego, Saul, Marisa, Lucia (sin tilde)... que me recuerdan lo duro que es crecer, ser adolescentes, dejar atrás la seguridad de que te manden y sentir el peso de tener que elegir... porque elegir una ficha significa renunciar a docenas y siempre nos podemos equivocar, y no hay a quién echar las culpas, más que a sí mismo... It´s life!
Pero yo no me equivoqué de profesión, en otras cosas tal vez sí, pero de profesión no. Lo bien que lo paso, cada día, eso es impagable (es una expresión, no tomar de forma literal.) Estuve a punto de ser una trabajadora de repsol, porque pasé todas las pruebas de admisión y me enviaron una carta para que me incorporara el próximo 1 de septiembre a su sede de Tarragona. A mi padre casi le da un patatús cuando dije que no iría "pero si es como sacar una oposición." Lo medité durante los meses de verano y en París (en un viaje inesperado con Carlitos) lo decidí, me iba a Salamanca a seguir estudiando.
¿Qué hubiera sido de mí en una plataforma petrolífera? o a saber dónde... Mi padre, que se cree que soy la leche, dice que ahora sería una jefaza... y yo le contestó "o me había partido la crisma de un resbalón".. ¿una jefaza? y ¿quién quiere ser una jefaza? lo que me hubiera faltado para ser insoportable...
Ahh, y mañana se termina también la Selectividad... parecía infinito este curso y se acaba... Aunque aún faltan las notas y que los chicos elijan la carrera. Otra vez hay que elegir ... y por ende, renunciar...Uff ¡qué presión!
