¡Vaya! Esto es lo peor. El final. Ayer acabó el curso de junio y otra vez personas maravillosas desaparecen de mi vida. Mis estudiantes, mis queridos estudiantes.
Debo decir adiós a Flavia, esa brasileña creativa que dejo su Fortaleza natal y su profesión de abogada para dejarse llevar por las letras y las metáforas primero perdiéndose en Argentina y ahora por tierras de España. Vos sabés que os llevo en el corasssón (de melón, melón, melón...)
Adiós también a Steven, nuestro estadounidense que dejó Bostón para enseñar en la España más auténtica y pasó un año en Ciudad Real y otro en Burgos. Suerte en tu tierra y mucho cuidado con lo que dices a los camareros en los bares, las españolas pueden ser muy traviesas.
Hoon, nuestro querido Donghoon, o mejor DonJuan, o David o Lee (el mismo que tiene 22 años en España y 24 en Corea) que llegó de Corea del Sur para dormir y salir por el Río de la Pila y hablarnos de su país en clase, una y otra vez. Espero que vuelvas y que tus estudios de Árabe te vayan muy bien, pero sobre todo espero que vuelvas.
A Luis solo le digo hasta luego porque en cualquier momento me lo encuentro con sus hermanos gemelos en la retransmisión de los Sanfermines, si es que aún se atreve tras las explicaciones que le dimos... ten cuidado que Pamplona no es Miami, ni la isla donde vives aunque tengáis tantos huracanes.
A Carolina y a Anjia les deseo mucha suerte, pero sé que volverán, Polonia y Alemania están a dos pasos y España es su segunda casa. Suerte y ¡Chicas al poder, en los deportes y en todo!
Ufff, menos mal que Silvia, Vania, Erika y Rina se van a quedar todo el verano... a vosotras ¡Hasta el lunes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario