Ayer fui a la manifestación contra la Reforma Laboral y los recortes en Cantabria .La convocaron los sindicatos en toda España. Así que a las doce del mediodía, con el paraguas en la mano bajaba yo por la Alameda pensando "Lo mismo que hago yo, hacen miles de personas ahora mismo por todo el país, acudir a protestar" y al llegar a la plaza de Numancia no cabía un alma "Uff, menos mal, somos muchos"
La marcha fue tranquila, saludamos a conocidos con trabajo, conocidos en paro...
Ahora nuestra sociedad se divide en esas dos clases de personas, unas con trabajo y otras sin él, aunque dentro de ellos también hay subclases: los recién parados jovenes, los recién parados viejos, los que cobran algo, los que na´de ná... los que viven con esperazanza y los deseperanzados.
Por otra parte está el grupo de los trabajadores, con otras dos grandes clases: los públicos y los privados, y ahí dentro, interinos, contratados, becarios etc
Creo que este gobierno lo sabe bien, nos han catalogado al dedillo y ahora se dedica a meter inquina de unos contra otros:
-"Te miro con receleo porque tú cobras ayuda por hijos y yo"
-"En la privada cobramos menos... eso, eso que les recorten el sueldo"
-"Está en paro por su culpa, que no estudió nada"
- "¿Ley de dependencia? que le cuiden sus hijas, a qué fin pagamos todos"
- "Que le echen que siempre está de baja y lo pagamos todos"
Es terrible. Como si lo peor de cada uno estuviera a flor de piel. La maldad y la vileza salen por la boca y se traslada a los medios de comunicación.
Pero vamos a ver, que todos debemos intentar mejorar, no empeorar. Si tú cobras 10 y yo 5, lo suyo es pelear por cobrar 10, por favor, no pelear porque todos cobremos 5. Así es como la humanidad ha ido progresando y salimos de la Edad Media. Si hay leyes que favorecen a un colectivo, no están puestas al tuntun. Imagínate, por un momento, vivir con un padre con alzheimer...ponerse en el lugar del otro podría ser un buen ejercicio para empezar el día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario